LAS DELICIAS DEL CASAR

Soy una agricultora y ganadera que trabaja hace más de veinte años en la explotación familiar dedicada al cultivo de hortalizas, sandia y melón y con un rebaño de ovejas de casi dos mil animales.

Además de mi trabajo en la explotación cuando llegaba la campaña del melón y la sandia instalaba un puesto en la carretera que cruza mi pueblo hacia Avila para venta directa.

¿CON QUÉ IDEA?

¿Cuántas veces hemos probado alguna hortaliza o fruta y no sabían nada? Estamos empezando a añorar los sabores y olores auténticos de un tomate, de un melocotón… Nos preocupamos por el etiquetado de un producto, por su procedencia y producción. Cada vez más, buscamos lo auténtico, lo de toda la vida, lo natural.

En “Las Delicias del Casar” puedes encontrar una gran variedad de productos naturales de la zona, desde todo tipo de frutas y verduras hasta dulces caseros, pasando por todo tipo de embutidos, quesos, miel, pan de leña… Un sinfín de productos naturales para que tu mesa vuelva al “sabor de siempre”.

Estoy convencida de que el abandono  de la actividad en el campo comporta el deterioro o la pérdida de hábitats de notable interés y singularidad ecológica.

Por ese motivo continua luchando como pequeña ganadera y agricultora pero además como presidenta de la Asociación de productor@s de ovino –SAT APOCOT- que lucha por una intervención decidida por parte de las administraciones implicadas y la sociedad en su conjunto para evitar la desaparición de esta actividad secular y del saber que atesora, ya que la ganadería extensiva encierra un impresionante legado etnográfico, cultural e histórico, así como un conocimiento singular en materia de manejo agropecuario y uso del medio.

¿QUÉ ES LO QUE MÁS TE GUSTA DE TU PUEBLO?

Me gusta el campo, el ganado, el territorio.

En un espacio privilegiado para además degustar una rica variedad de los productos de calidad, en un entorno inigualable…

La sandía de Velada es uno de los principales motores de la economía de este municipio, siendo un cultivo de secano y ecológico, estas sandías tienen gran sabor y las mayores pueden llegar a alcanzar más de 30 kg de peso. Crecen en una extensa zona llamada «El Baldío» pero además Velada cuenta con ecosistemas de gran valor natural, los pastos seminaturales forman parte de un largo proceso en el que la actividad humana y la presencia de herramientas de manejo tradicionales como el riego, las siembras, el pastoreo o la siega,  han fraguado un paisaje en mosaico que de otra forma no existiría.

CUÉNTANOS ALGO ESPECIAL QUE LE CARACTERICE

Velada es uno de los doce municipios que pertenecen a la Campana de Oropesa y ocupa el límite occidental de la provincia, de Toledo se encuentra a 90 km. El pueblo se separa en dos barrios, uno al norte y otro al sur, y por el medio pasa un arroyo. Los habitantes de este pueblo, casi 3000, están orgullosos de su convento de los Franciscanos y de la casa-palacio de Don Jiménez Dávila, marqués de Velada.

Podremos hacer una parada en su bonita iglesia muestra del estilo gótico de transición al renacimiento. El chapitel que remata la torre y la bóveda de crucería ojival que cubre el presbiterio son dos de sus elementos más destacables. El templo está dedicado a San Bernardino de Siena.

Velada es uno de los municipios con más producción de sandías en Castilla-La Mancha, el Ayuntamiento organiza un concurso para premiar al agricultor o agricultora que consiga cosechar la sandía más grande y más pesada del verano.